Por David Faitelson
Milenio.com
Miré emocionado a Rafael Ocampo mientras me decía que podía comenzar la semana que viene. “Es como volver a casa”, le dije y mi mente se transportaba a algún día de aquel verano de 1985, cuando mi padre, casi eufórico, entró a casa sosteniendo orgulloso un ejemplar de un periódico de portada verde y vivos en blanco, señalando una pequeña columna de la pagina 7, donde la cabeza en letras negras sentenciaba: “No somos favoritos: Bora”.
Era la primera vez que firmaba una nota en mi carrera periodística y lo hacía en La afición. Quiero aprovechar este nuevo inicio para agradecer a muchas personas que me ayudaron a que este proyecto se transformara en una realidad: A Carlos Marín, a Ciro Gómez Leyva, a Rafael Ocampo, a Carlos Albert, a José Ramón Fernández Gutiérrez de Quevedo y a las autoridades de mi casa de trabajo, ESPN, a Chris Calcinari y a Rodolfo Martínez. Muchas gracias a todos ellos y a usted, porque a partir de ahora tendrá que soportar mis ideas, mis ilusiones, mis compromisos, mis terquedades, mis absurdos y también mis sueños.
Me imagino que ya sabe o puede usted adivinar contra quién cierra el torneo el América. ¡Contra el Necaxa! Increíble, misterioso, tenebroso o podríamos decir…¡asqueroso! Luego de la victoria -hasta cierto puntos sospechosa- que el América sacó el viernes de Zapopan, las esperanzas de una clasificación se basan en circunstancias meramente matemáticas, pero aun siendo así, los dirigentes de la FMF se han encargado de que en la última fecha se pudiese definir algo entre dos equipos que pertenecen al mismo dueño.
Ya damos por entendido que el futbol mexicano juega bajo un velo de ilegalidad. Ya damos por entendido que un mismo propietario tenga tres equipos en la misma liga. Ya damos por entendido que el presidente de la Federación y el secretario general del organismo son empleados de ese mismo dueño. Ya damos por entendido muchas irregularidades y mentiras que rodean a este futbol, pero qué necesidad existe de poner un Necaxa-América en la última fecha del campeonato. Los “genios” que preparan el calendario no pueden programar los duelos entre “hermanitos” en las primeras fechas de un torneo para así evitar que las suspicacias y el amarillismo invadan las canchas.
Don Justino Compeán y Don Decio de Maria: No hay que ser muy inteligentes para entender el tema y para prevenir la situación o tal vez no les importa, o tal vez sí y o quizá la situación se ha convertido en un reto o en una demostración de poder. Somos… ¿o nos hacemos?
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Miré emocionado a Rafael Ocampo mientras me decía que podía comenzar la semana que viene. “Es como volver a casa”, le dije y mi mente se transportaba a algún día de aquel verano de 1985, cuando mi padre, casi eufórico, entró a casa sosteniendo orgulloso un ejemplar de un periódico de portada verde y vivos en blanco, señalando una pequeña columna de la pagina 7, donde la cabeza en letras negras sentenciaba: “No somos favoritos: Bora”.
Era la primera vez que firmaba una nota en mi carrera periodística y lo hacía en La afición. Quiero aprovechar este nuevo inicio para agradecer a muchas personas que me ayudaron a que este proyecto se transformara en una realidad: A Carlos Marín, a Ciro Gómez Leyva, a Rafael Ocampo, a Carlos Albert, a José Ramón Fernández Gutiérrez de Quevedo y a las autoridades de mi casa de trabajo, ESPN, a Chris Calcinari y a Rodolfo Martínez. Muchas gracias a todos ellos y a usted, porque a partir de ahora tendrá que soportar mis ideas, mis ilusiones, mis compromisos, mis terquedades, mis absurdos y también mis sueños.
Me imagino que ya sabe o puede usted adivinar contra quién cierra el torneo el América. ¡Contra el Necaxa! Increíble, misterioso, tenebroso o podríamos decir…¡asqueroso! Luego de la victoria -hasta cierto puntos sospechosa- que el América sacó el viernes de Zapopan, las esperanzas de una clasificación se basan en circunstancias meramente matemáticas, pero aun siendo así, los dirigentes de la FMF se han encargado de que en la última fecha se pudiese definir algo entre dos equipos que pertenecen al mismo dueño.
Ya damos por entendido que el futbol mexicano juega bajo un velo de ilegalidad. Ya damos por entendido que un mismo propietario tenga tres equipos en la misma liga. Ya damos por entendido que el presidente de la Federación y el secretario general del organismo son empleados de ese mismo dueño. Ya damos por entendido muchas irregularidades y mentiras que rodean a este futbol, pero qué necesidad existe de poner un Necaxa-América en la última fecha del campeonato. Los “genios” que preparan el calendario no pueden programar los duelos entre “hermanitos” en las primeras fechas de un torneo para así evitar que las suspicacias y el amarillismo invadan las canchas.
Don Justino Compeán y Don Decio de Maria: No hay que ser muy inteligentes para entender el tema y para prevenir la situación o tal vez no les importa, o tal vez sí y o quizá la situación se ha convertido en un reto o en una demostración de poder. Somos… ¿o nos hacemos?
http://www.milenio.com/node/107492
2 Comentarios
Faitelson ya se gano un post...
ResponderEliminarya todos sabemos de las trampas que se hacen entre las wilas del a-marica y NECAXA...que se puede esperar de ese equipo tramposo y corrupto...si lo checaran (wilas) como a la juventus a profundidad...le dejarian un titulo y estaria en tercera division..
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