En un encuentro deslucido que tuvo como saldo un jugador noqueado y un par de expulsados, el Atlas del Guadalajara venció por 2-1 a los Hidrorayos del Necaxa, en duelo correspondiente a la Jornada 16 del Apertura 2006.
Los tantos del encuentro para los rojinegros fueron obra de Hugo Rodallega y Gregorio Torres, mientras que por el Necaxa marcó Oscar Zea de tiro libre. La nota dramática la dio Joaquín Beltrán, quien tuvo que salir en camilla al quedar noqueado un par de minutos sobre el césped tras un durísimo encontronazo con Emanuel Villa. Afortunadamente, el defensor no sufrió ninguna lesión de cuidado.
Con este triunfo, el Atlas se trepó al segundo lugar del Grupo Uno, y sólo un milagro en la última jornada evitaría que estuvieran en la próxima Liguilla. Por su parte, el Necaxa de Hugo Sánchez puso un pie y medio fuera de la fiesta grande, pues quedó con 17 unidades, en el fondo del mismo sector.
Los Hidrorayos se jugarán su última posibilidad de Liguilla el próximo miércoles 8 de Noviembre, cuando reanuden el duelo pendiente de la Jornada 13 ante Morelia que fue suspendido por lluvia.
PRIMER TIEMPO
El inicio de este cotejo fue flojo. Los dos cuadros, rivales directos del Grupo Uno, fueron cautelosos en los minutos iniciales, sobre todo el Necaxa, tomando en cuenta su condición de visitante. La lucha sorda por el esférico predominaba en el juego, y el medio sector de la cancha era el más poblado.
Al minuto 11 llegó la primera intervención importante del arquero de los Hidrorrayos, Iván Vázquez, quien tuvo que rifarse el físico ante Rodallega, que llegaba de frente luego de un pase filtrado de Caniza. El resultado final de esta jugada fue un duro golpe en la frente del cancerbero, quien tuvo que ser atendido tras un rodillazo sin intención que le propinó el colombiano.
El tiempo corría y la contienda no se prendía. Ambos arcos se mantenían intactos, y las zagas, sobre todo la del Atlas, tenían muy poco trabajo. El compomiso tomó tintes dramáticos al minuto 22, cuando Joaquín Beltrán quedó conmocionado tras un terrible encontronazo con Emanuel Villa, quien buscaba un centro por alto. Afortunadamente, Beltrán se recuperó, sin embargo, tuvo que dejar el terreno de juego, dejando su lugar a Luis Omar hernández.
Tras la reanudación del duelo, Alfredo Moreno estuvo a punto de abrir el marcador con un tiro suave y bombeado que ejecutó tras un despeje que techó a la zaga atlista; sin embargo, un oportuno Denis Caniza evitó, con las uñas, la caída de su meta.
Ya cerca del final del primer lapso, el balón iba y venía sin que alguno de los dos equipos pudiera darle un rumbo fijo. Y cuando el minuto 45 estaba a punto de llegar, Hugo Rodallega aprovechó un descuido de la zona baja hidrocálida para poner a funcionar los cartones. Osorno, con libertades, tomó el balón dentro del área por la izquierda, desde donde sirvió para Villa quien, con un cabezazo suave, habilitó al ariete colombiano, quien sólo tuvo que empujar el esférico al fondo de las redes.
SEGUNDO TIEMPO
Luego de una primera parte floja, en la que el Atlas hizo lo mínimo para tomar la ventaja en el marcador, se esperaba que ambos cuadros jugaran la parte complementaria con mayor intensidad.
Y Atlas, que aun sueña con los primeros lugares de la tabla, fue quien tomó la batuta del encuentro, haciéndose presente en la meta rival con mayor fuerza que en toda la primera mitad. Juan Carlos Medina tuvo la oportunidad de tomar el lugar del “Tripa” Pérez, suspendido, y lo hizo muy bien, orquestando con propiedad cada avance atlista.
El conjunto tapatío se dio cuenta que un buen acceso al arco contrario era el tiro de media distancia, y así lo intentaron. En un par de ocasiones, Medina probó desde fuera del área, mientras que Balcázar lo hizo en una oportunidad, pero todas sin la puntería necesaria.
Minutos más tarde, el árbitro del encuentro, Germán Arredondo, decidió echar, de manera bastante quisquillosa, a Andrés Olivera, dejando con 10 hombres al Necaxa. Con todo y esto, el conjunto visitante se fue en busca del empate, y fue al minuto 76 cuando, de manera fortuita, lo encontró.
En un balón parado por la banda derecha, Oscar Zea mandó tiro centro que se fue directo al fondo de las redes del arco de Mario Rodríguez sin que nadie la tocara. Ya con el empate en la bolsa, necaxa buscó reagruparse para soportar los últimos minutos del cotejo, pero sus intenciones fueron destrozadas por Gregorio Torres, quien entró en la segunda parte.
Tres minutos después del tanto rojiblanco, el joven Torres tomó el balón por la izquierda, avanzó varios metros sin presión de algún rival, y al acercarse al área rival sacó un escopetazo de zurda que se incrustó pegada al poste derecho del arco custodiado por Iván Vázquez, quien se tiró mal ante el envío del rojinegro.
La actuación del silbante tuvo un nuevo punto en contra al minuto 80, cuando echó, por doble a marilla, a Andrés Guardado, pues supuestamente el rojinegro hizo tiempo deliberado al tratar de sacar de banda.
Los minutos finales contaron con el dominio del Atlas, por lo que la reacción necaxista esta vez no apareció en el estadio Jalisco.
ARBITRAJE
Malo de Germán Arredondo. Confundido, errático y quisquilloso se vio al silbante Arredondo, quien exageró al echar a Andrés Olivera por dos faltas en la misma jugada. Además, anuló un gol legítimo de Emanuel Villa, e incluso debió anular el gol necaxista, ya que Oviedo hace pro el balón desde una posición prohibida, y aunque no toca el esférico, distrae al arquero rojinegro.
Los tantos del encuentro para los rojinegros fueron obra de Hugo Rodallega y Gregorio Torres, mientras que por el Necaxa marcó Oscar Zea de tiro libre. La nota dramática la dio Joaquín Beltrán, quien tuvo que salir en camilla al quedar noqueado un par de minutos sobre el césped tras un durísimo encontronazo con Emanuel Villa. Afortunadamente, el defensor no sufrió ninguna lesión de cuidado.
Con este triunfo, el Atlas se trepó al segundo lugar del Grupo Uno, y sólo un milagro en la última jornada evitaría que estuvieran en la próxima Liguilla. Por su parte, el Necaxa de Hugo Sánchez puso un pie y medio fuera de la fiesta grande, pues quedó con 17 unidades, en el fondo del mismo sector.
Los Hidrorayos se jugarán su última posibilidad de Liguilla el próximo miércoles 8 de Noviembre, cuando reanuden el duelo pendiente de la Jornada 13 ante Morelia que fue suspendido por lluvia.
PRIMER TIEMPO
El inicio de este cotejo fue flojo. Los dos cuadros, rivales directos del Grupo Uno, fueron cautelosos en los minutos iniciales, sobre todo el Necaxa, tomando en cuenta su condición de visitante. La lucha sorda por el esférico predominaba en el juego, y el medio sector de la cancha era el más poblado.
Al minuto 11 llegó la primera intervención importante del arquero de los Hidrorrayos, Iván Vázquez, quien tuvo que rifarse el físico ante Rodallega, que llegaba de frente luego de un pase filtrado de Caniza. El resultado final de esta jugada fue un duro golpe en la frente del cancerbero, quien tuvo que ser atendido tras un rodillazo sin intención que le propinó el colombiano.
El tiempo corría y la contienda no se prendía. Ambos arcos se mantenían intactos, y las zagas, sobre todo la del Atlas, tenían muy poco trabajo. El compomiso tomó tintes dramáticos al minuto 22, cuando Joaquín Beltrán quedó conmocionado tras un terrible encontronazo con Emanuel Villa, quien buscaba un centro por alto. Afortunadamente, Beltrán se recuperó, sin embargo, tuvo que dejar el terreno de juego, dejando su lugar a Luis Omar hernández.
Tras la reanudación del duelo, Alfredo Moreno estuvo a punto de abrir el marcador con un tiro suave y bombeado que ejecutó tras un despeje que techó a la zaga atlista; sin embargo, un oportuno Denis Caniza evitó, con las uñas, la caída de su meta.
Ya cerca del final del primer lapso, el balón iba y venía sin que alguno de los dos equipos pudiera darle un rumbo fijo. Y cuando el minuto 45 estaba a punto de llegar, Hugo Rodallega aprovechó un descuido de la zona baja hidrocálida para poner a funcionar los cartones. Osorno, con libertades, tomó el balón dentro del área por la izquierda, desde donde sirvió para Villa quien, con un cabezazo suave, habilitó al ariete colombiano, quien sólo tuvo que empujar el esférico al fondo de las redes.
SEGUNDO TIEMPO
Luego de una primera parte floja, en la que el Atlas hizo lo mínimo para tomar la ventaja en el marcador, se esperaba que ambos cuadros jugaran la parte complementaria con mayor intensidad.
Y Atlas, que aun sueña con los primeros lugares de la tabla, fue quien tomó la batuta del encuentro, haciéndose presente en la meta rival con mayor fuerza que en toda la primera mitad. Juan Carlos Medina tuvo la oportunidad de tomar el lugar del “Tripa” Pérez, suspendido, y lo hizo muy bien, orquestando con propiedad cada avance atlista.
El conjunto tapatío se dio cuenta que un buen acceso al arco contrario era el tiro de media distancia, y así lo intentaron. En un par de ocasiones, Medina probó desde fuera del área, mientras que Balcázar lo hizo en una oportunidad, pero todas sin la puntería necesaria.
Minutos más tarde, el árbitro del encuentro, Germán Arredondo, decidió echar, de manera bastante quisquillosa, a Andrés Olivera, dejando con 10 hombres al Necaxa. Con todo y esto, el conjunto visitante se fue en busca del empate, y fue al minuto 76 cuando, de manera fortuita, lo encontró.
En un balón parado por la banda derecha, Oscar Zea mandó tiro centro que se fue directo al fondo de las redes del arco de Mario Rodríguez sin que nadie la tocara. Ya con el empate en la bolsa, necaxa buscó reagruparse para soportar los últimos minutos del cotejo, pero sus intenciones fueron destrozadas por Gregorio Torres, quien entró en la segunda parte.
Tres minutos después del tanto rojiblanco, el joven Torres tomó el balón por la izquierda, avanzó varios metros sin presión de algún rival, y al acercarse al área rival sacó un escopetazo de zurda que se incrustó pegada al poste derecho del arco custodiado por Iván Vázquez, quien se tiró mal ante el envío del rojinegro.
La actuación del silbante tuvo un nuevo punto en contra al minuto 80, cuando echó, por doble a marilla, a Andrés Guardado, pues supuestamente el rojinegro hizo tiempo deliberado al tratar de sacar de banda.
Los minutos finales contaron con el dominio del Atlas, por lo que la reacción necaxista esta vez no apareció en el estadio Jalisco.
ARBITRAJE
Malo de Germán Arredondo. Confundido, errático y quisquilloso se vio al silbante Arredondo, quien exageró al echar a Andrés Olivera por dos faltas en la misma jugada. Además, anuló un gol legítimo de Emanuel Villa, e incluso debió anular el gol necaxista, ya que Oviedo hace pro el balón desde una posición prohibida, y aunque no toca el esférico, distrae al arquero rojinegro.
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