Episodios Tormentosos

Los cinco episodios más dolorosos en la historia de los Rayos

SE QUEDARON EN EL AMATEURISMO

El Necaxa surgió el 21 de agosto de 1923 cuando la escuadra Luz y Fuerza se funcionó con Tranvías contando con el auspicio del gerente de la compañía de Luz y Fuerza de México: el ingeniero inglés William H. Frasser. Con su respaldo, este equipo llegó a ganar cuatro ligas (1932-33, 1934-35, 1936-27 y 1937-38) e igual número de copas (1924-25, 1925-26, 1932-33, 1936-37).

Esa escuadra, uniformada de rojo y blanco en honor a la nación de Frasser, era ofensiva y recibió el mote de los Once Hermanos por la comunión que eistía entre sus jugadores, de los cuales destacaban: Raúl Pipiolo Estrada, Hilario Moco López y Luis Pichojos Pérez.

Sin embargo, tras el asesinato de Frasser, Luz y Fuerza de México desapareció al equipo al cabote la temporada 1942-43, la última de la época amateur.

El último partido de esta primera etapa de Necaxa se registró el 18 de abril de 1943 en el Parque Asturías. Ese día, los rojiblancos vencieron 4-3 al España.

LA CONVERSIÓN EN TOROS

La desaparición del España y del Asturias 1950 derivó en el resurgimiento de Necaxa. Esta ves, respaldados por Juan José Rivera Rojas, presidente del Sindicato de Electricistas. Los Rojiblancos solicitaron su reingreso a la Primera División. Está nueva etapa duró 20 años, aunque ese Necaxa no arrastró las multitudes de los Once Hermanos.

Aún así, por sus filas pasaron jugadores de jerarquía cómo Jose Antonio Roca, José Luis Lamadrid, Mario Velarde, Guillermo Ortiz, Dante Juárez y Manuel Lapuente. En 1970 los necaxistas finalizaron en el lugar 16, último de la tabla general, con 19 puntos. Sin embargo, y para su benefició en esa ocasión no hubo descenso y los Electricistas disfrutaron de una temporada más en el máximo circuito, pero no lograron mejorar.

La siguiente campaña, Necaxa obtuvo el puesto 12 de 18 competidores con 31 puntos. Y el colmo, en su último juego en esta etapa lo goleó Toluca 4-0 en el Azteca el 19 de Septiembre de 1971. Ese año, por endeudamiento, la directiva necaxista vendió la franquicia a unos empresarios españoles que dieron vida a los Toros del Atlético Español. No solo le cambiaron el nombre, sino que las rayas de la playera mudaron a blancas y negras y, el short a negro.

LA MUDANZA: FUERA RAYOS

En 1982 Televisa compró al Atlético Español y para la temporada 1982-83, hizo resurgir a Necaxa con su tradicional vestimenta. Desde el principio el equipo estuvo a la sombra del América, el cual le mandaba a los jugadores que no le habían funcionado o que ya no le servían. La falta de identidad fue una constante, y su sede (el Estadio Azteca) casi siempre lució despoblada.

Con Técnicos cómo Anibal Ruíz y Roberto Saporitti, Los rayos comenzaron a ser competitivos gracias a una generación comandada por Nicolás Navarro, Ignacio Ambriz, Alex Aguinaga, Ricardo Pelaéz e Ivo Basay. Luego, en 1994 llegó a la banca Manuel Lapuente a dar los primeros títulos de la época profesional (1994-95 y 1995-96) al tiempo que el club lanzaba una campaña para enraizar al necaxismo. El equipo ganó su tercera corona en el invierno 1998, pero la gente seguía sin acompañarlo, Así que su propietario decidió mudarlo en 2003 con la intención de llevar fútbol de Primera División a una plaza que no lo tenía y si lo deseaba: Aguascalientes.

PÉRDIDA DE CATEGORÍA

La noche del 9 de Mayo fue una de las más tristes en la historia del Necaxa. Ésta vez, en el estadio azteca, dónde alzaron sus dos primeros títulos en la época profesional, los Rayos se despidieron del máximo circuito con una derrota 1-0 ante el América.

En ese equipo, dirigido por Raúl Arías (el hombre que les dio la tercera corona) alinearon jugadores de reconocida capacidad, quienes habían sido contratados para eludir el descenso: el chileno Ricardo Rojas, los argentinos Pablo Quatrocchi, Eduardo Coudet. Así mismo había jóvenes extraídos de las fuerzas inferiores: Iván Vázquez, Luis Omar Hernández y Mario Pérez.

En conferencia de prensa, Roberto Muñoz, entonces presidente, se encargó de dar la cara ante el fracaso: “Se siente una tristeza tremenda, una impotencia terrible. En el vestidor, todo mundo está llorando, ahorita no se habla nada, no hay palabras que puedan explicar la impotencia que sentimos en este momento”, dijo Muñoz.

Pero la ausencia duraría poco, los hidrorayos ganaron los torneos apertura 2009 y Bicentenario 2010en la Liga de Ascenso y subieron automáticamente.

EN RIESGO OTRA VEZ

Los Rayos, dirigidos por Omar Arellano, retornaron a Primera División con el handicap de maneja el promedio más volátil en la tabla de cocientes.

La directiva apostó por el mismo entrenador, sin embargo, la paciencia fue poca y, en la sexta jornada del apertura 2010 lo despidieron por haber obtenido seis puntos de 18. Su reemplazante, Daniel Brailovsky, tampoco fue la solución luego de lograr diez puntos de 45 posibles, ninguno de éstos sumado durante el Clausura 2011, torneo que los Rayos comenzaron con la necesidad de ganar 32 puntos para salvarse sin necesidad detenerse a lo que pasara con otros equipos involucrados en la lucha.

El Ruso fue cesado después de la cuarta fecha, y hasta la qunta Necaxa pudo sumar su primera unidad, ya con un nuevo timonel: Sergio Bueno, quien luego de vencer al América mantiene la esperanza de salvar al equipo pese a que los pronósticos lo sentencian.

Nota: El texto fue publicado en la edición de Marzo de Fútbol Total, después de la jornada 6 Vs América.

Fuente: Revista Futbol Total

Transcripción del Texto: Borrego