Pablo no descarta volver a Argentina

Pablo Quatrocchi, surgido en las Inferiores de la Cerveza, no se resigna a que el equipo descienda y sigue confiando en Caruso Lombardi. A pesar de tener una vida tranquila en Necaxa, habla de sus ganas de volver a Argentina. Y deja un aviso para la Copa América: “Ojo, México puede ser la sorpresa”.

Se acerca el final de la temporada en la Argentina. La sensación es distinta a todas las anteriores: la opinión pública deportiva centra particularmente su atención en quiénes jugarán la Promoción y qué clubes sufrirán directamente la pérdida de la categoría. De por sí, ya es atractivo que varios equipos estén en la misma nebulosa, incluso dos gigantes: River e Independiente. Ahí, en lo más profundo del abismo se encuentra Quilmes, club que para Pablo Quatrocchi se va a salvar por la “fabulosa” Promoción.

-Lo decís convencido...

-Ya sé, lo dicen todos, Quilmes está muy jodido, aunque tengo fe en que va a salir adelante. Es fabulosa porque si zafa del descenso el futbolista sabe que juega la Promo y puede quedarse en Primera. Es impresionante cómo la gente acompañó en los malos momentos y ¿cómo no se va a ilusionar ahora? Para los hinchas, lo peor ya pasó...

-De hecho, hasta hace poco Quilmes no tenía ninguna esperanza...

-La confianza es todo para el futbolista, y te lo digo porque descendí dos veces con Necaxa. Está claro que Caruso Lombardi tiene menos trabajo que Tocalli y Madelón, pero es más simple y motivador. Funcionó muy bien. Pase lo que pase, Quilmes debe agradecerle esta entrega final al equipo. Y si les toca descender, deberían mantener la estructura para volver pronto a Primera.

-¿Te bancarías al equipo en la B? 

¡Obvio! -¿Cómo ves hoy a Quilmes institución? -En el último tiempo le dieron trabajo a muchos chicos que jugaron en el club, como Leo Colombo y Mauricio López. Es muy bueno, nunca lo habían hecho. Siempre hablamos del club con el Máquina Giampetri, un crack que hoy juega en Perú.

-En México, los medios hablan de tu retiro de la actividad...

-Lo venía barajando, pero todavía no es el momento. Lamentablemente, en el Necaxa descendimos otra vez. A mi edad, es difícil encontrar otra nueva motivación para subir. ¡Y hace unos años jugamos la Libertadores! El club tiene instalaciones del primer mundo, con estadio nuevo y una hinchada maravillosa. Con el Chipi Gandín la remamos hasta el final y no se pudo...

-¿Y ahora? 

Me siento muy bien, jugué todos los partidos de la última temporada. En mi conciencia pienso en volver a la Argentina por la familia, por mi edad (37 años) y porque siento que todavía tengo mucho para dar. Terminé el último partido y le di la prioridad a Necaxa para continuar, porque estoy identificado con la gente, soy capitán desde hace tres años y estoy muy agradecido, pero ahora decidí volver a mi país.

-¿Esperás ofertas? 

Sí, y de todos los clubes que se acerquen. Ojalá termine pronto el Clausura para comenzar a entrenarme, porque ya araño las paredes, je. Sin jugar, no me encuentro.

-¿Y si podés elegir? 

Mi corazón está en Quilmes, lugar en el que hice todas las Inferiores y debuté, donde está mi casa y la zona que elegí para que se críen mis hijos. Ojo, en Estudiantes viví momentos muy lindos, varios años con Prátola, Azconzábal, Palermo... El Pincha cambió para bien, y es difícil que me contraten con mi edad, je.

-¿Cómo está el fútbol mexicano? 

Uf, ha crecido muchísimo, sobre todo desde que La Volpe dirigió a la selección. Nos vamos a llevar una sorpresa en la Copa América, México presentará a los juveniles que tienen mucha proyección. Allá, hace tiempo que se trabaja con las comodidades de cualquier equipo europeo, y lo certifico porque jugué en Wolfsburgo y no se ve diferente infraestructura como la que te ofrece Necaxa.

-Pero querés volver...

-Sí, el que jugó en Argentina extraña siempre todo lo que rodea nuestro fútbol. Con Gandín, en la concentración veíamos los domingos los clásicos argentinos de la fecha, como lo llaman allá. Lo pasión que acá se respira es inigualable...

Fuente: Olé