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Apertura 2006 | NECAXA 3-1 PACHUCA...

Gracias a una gran actuación de los brasileños Fabiano Pereira y Kléber Boas, el Necaxa logró este sábado su primer triunfo del Apertura 2006, tras derrotar por 3-1 a los Tuzos del Pachuca, que no levanta en el torneo.

Kléber en dos ocasiones y su compatriota Pereira desde los 11 pasos dieron forma a un marcador que a la postre lució un tanto injusto, ya que el Pachuca no dio un mal partido, pero sucumbió ante algunas distracciones en defensa. Por los visitantes marcó Cristian Giménez en un “madruguete” en cobro de tiro libre directo.

Con los dos goles que marcó esta noche, Kléber Boas llegó 4, con lo que se coloca en el liderato de goleo individual del Apertura 2006, al lado del mexicano Miguel Sabah, quien logró un tanto en la victoria del Cruz Azul ante las Chivas.

Así, Necaxa alcanzó su primer triunfo en lo que va del Apertura 2006 y Pachuca, sin puntos, se quedó en el último lugar de la tabla general.

PRIMER TIEMPO
Presionados por la mala situación en este Apertura 2006, Necaxa y Pachuca saltaron al terreno de juego del estadio Victoria con la firme intención de no perder. Los Tuzos, un poco más necesitados, se olvidaron de la lluvia que caía en Aguascalientes y fueron los primeros en mostrar buenas intenciones al frente.

Al minuto 3, Gabriel Caballero se plantó a un metro del área necaxista y sobre la marcha sacó un disparo de pierna izquierda que se fue apenas a un lado del arco defendido por Iván Vázquez.

La respuesta de los Hidrorayos tardó en llegar, ya que el Pachuca dominaba las acciones. Dicha reacción se presentó al minuto 10, cuando el brasileño Kléber prendió la pelota de zurda, sacando un balazo que se fue por encima del travesaño del arquero Humberto Hernández, quien se mostraba seguro bajo los tres palos hidalguenses en sustitución del lesionado Miguel Calero.

Las jugadas en los arcos no eran demasiadas, y las condiciones del terreno de juego complicaban las acciones. Damián Álvarez, al 14, remató suave y de primera intención un centro raso desde la derecha que con el césped mojado tomó velocidad y terminó sorprendiendo al argentino, que no esperaba el balón tan fuerte.

La lluvia, suave pero constante, caía, el tiempo corría, pero el futbol no aparecía en Aguascalientes. Necaxa niveló un poco las acciones, sin embargo no lograba presentarse con peligro en el área hidalguense. Lo más cerca que estuvieron fue en un centro de Mario Pérez que Kléber, estirándose al máximo, no alcanzó a contactar.

El minuto más intenso del primer lapso fue el 27. Primero, Gabriel Caballero se perdió la más clara para su equipo, cuando Álvarez lo dejó solo con un centro desde la derecha que el naturalizado mexicano mandó por un lado, y segundos después, Kléber bajó con el pecho y de media vuelta sacó un disparo que el joven Humberto Hernández sacó por encima de su arco.

La mejor jugada de la primera mitad concluyó en la primera anotación del encuentro. A velocidad, Necaxa salió por la derecha, desde donde el brasileño Fabiano Pereira sirvió filtrado para su paisano Kléber, quien de primera intención, sentenció ante la salida de Hernández.

Pese a la desventaja, Pachuca no cambió su forma de jugar y continuó buscando el gol, sin embargo, el partido tomó un rumbo definitivo al 40, cuando Correa jaloneó dentro del párea tuza a Fabiano Pereira, situación que provocó la marcación de un penal a favor del conjunto local. Al 41’, el mismo Pereira cambió la pena máxima por el segundo tanto hidrocálido.

SEGUNDO TIEMPO
Necaxa inició con todo la segunda mitad. En la primera jugada de la parte complementaria, Beltrán dejó ir una jugada clarísima de gol, cuando, en tiro de esquina, quedó solo dentro del área chica, pero su remate se fue increíblemente a un lado de Hernández. Minutos después, Olivera quedó cerca del tercer gol rojiblanco en un disparo cruzado de zurda que se fue apenas abierto.

A diferencia de la primera mitad, en los 45 minutos complementarios Pachuca se veía desconcertado y no encontraba la forma de perforar la meta de Iván Vázquez, que en el inicio del complemento se mantuvo tranquilo y sin mayor actividad.

Ante la imposibilidad de comprometer el cero en el arco necaxista en jugadas elaboradas, el “Chaco” Giménez, que ingresó para la segunda mitad, se avivó en un cobro de tiro libre y madrugó al arquero Vázquez, cuando éste se encontraba acomodando a su barrera. Así, Pachuca logró acortar distancias al minuto 56.

La anotación revivió a los hidalguenses, que al 60 estuvieron cerca del empate gracias a un tiro lejano y potente del mismo Giménez, pero Vázquez, atento, se lanzó para mandar el balón a corner. La resurrección tuza metía en serios problemas a la zaga local, que con apuros evitaba que los avances hidalguenses concluyeran en el fondo de sus redes.

Luego de varios minutos de asedio tuzo, las cosas se calmaron. El partido entró a un ritmo más conveniente para los locales y esto provocó que su meta se mantuviera intacta. Ante esta situación, el “Ojitos” Meza mandó al terreno de juego a Juan Carlos Cacho en lugar de Marvi Cabrera, delantero que buscaría el ansiado gol del empate para los de Hidalgo.

El riesgo de sacar a un zaguero para poner a un atacante era obvio, pero Meza decidió correrlo, y las consecuencias no tardaron en llegar. Al minuto 78, en un contragolpe que inició tras un error del “Pollo” Salazar, Pereira tocó para Kléber, quien al intentar regresarle el balón a su paisano, lo estrelló en el arquero Hernández, quedando solo para lograr el 3-1 en el marcador.

Tras la tercera anotación necaxista, el desánimo en los jugadores tuzos era evidente, sin embargo, nunca dejaron de luchar Incluso, Caballero acortó distancias a un minuto del final, pero lo hizo en posición adelantada, por lo que el tanto debió ser anulado.

Así, Necaxa alcanzó su primer triunfo en lo que va del Apertura 2006 y Pachuca, sin puntos, se quedó en el último lugar de la tabla general.

ARBITRAJE
Bueno de Fabián Delgado. El silbante llevó bien el encuentro. Anuló correctamente el que hubiera sido el segundo gol del Pachuca por un fuera de lugar del anotador, Gabriel Caballero. Su única falla fue permitir que ambos arqueros vistieran suéteres del mismo color, cosa que por reglamento no debe ser permitido.

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