Opinión PR | Azcárraga, Salinas y Slim: La lucha por el control del fútbol

Por Rafael Vera.

@rafaelverasa

Hola amigos de Pasión Rojiblanca. En esta ocasión me quiero salir de revisar temas de números y estadísticas para tocar otro tema de interés. Los últimos días han traído muchas cosas de qué hablar acerca de nuestros Rayos: la llegada de un petardo como el tal De Pinho, una lista de transferibles a mi juicio algo injusta, los partidos planeados de pretemporada y el tema del que les quiero hablar el día de hoy: las batalla de los magnates de las telecomunicaciones por el control del fútbol mexicano.

Hablar del fondo y la esencia del problema sería alejarnos mucho del tema principal del blog: nuestro Necaxa. Y como no quiero que el Taker me deje de publicar por andarlos durmiendo con cosas que ni al caso, me limitaré a decir que la reciente adquisición de los Tiburones por parte de Televisa, así como la participación mayoritaria de Carlos Slim en el grupo Pachuca (que a su vez acaba de comprar a Estudiantes), sólo es parte de la estrategia de una más de las batallas que estos magnates están librando por ganar terreno en el campo de las telecomunicaciones. La batalla se libra en el fútbol de pantalón largo, y es que estos tres personajes saben que controlar el fútbol es un trampolín único para controlar la tele abierta.

Pero bueno, a lo que nos incumbe. ¿Cómo afecta esto al Necaxa? Desde mi punto de vista, el impacto de los recientes acontecimientos es incierto, yendo a los extremos tendremos una óptica optimista y otra pesimista.

Desde la óptica pesimista, la compra del Veracruz por parte de Televisa nos llevará irremediablemente a la venta del equipo y posterior desaparición del club. Los argumentos para respaldar esta conclusión son tres y muy sencillos.

1. El primero es que, por lo menos en los últimos años, el fútbol no es la prioridad de la televisora de San Ángel. Al menos así lo indican la venta del San Luis, sus mediocres coberturas a los últimos eventos futbolísticos importantes, o el abandono a su suerte en el que tienen al América, ya no digamos nada del Necaxa. De modo que la adquisición de otro equipo le implica más trabajo en tareas que, por lo menos de momento parece que no le interesan.
2. En segundo lugar, la interacción y repartición de recursos entre los tres conjuntos puede dejar muy mal parado al Necaxa. No es un secreto, ni mucho menos nada nuevo que cuando se trata de “repartirse” jugadores y recursos entre tres equipos Televisos, el Necaxa casi siempre ha llevado las de perder. Los claros ejemplos han sido nuestros alguna vez hermanos Atlante y San Luis. El único caso en donde no pasó así fue con las efímeras Cobras (o Sobras) del Querétaro; sinceramente, y después de ver a Alex Aguinaga y Enrique Borja como los respectivos DT y Presidente de los Tiburones, dudo mucho que este sea el caso.
3. Por último, y el más polémico, es que la historia no vende por sí sola. Muchos de ustedes me deben estar recordando a mi progenitora al leer esto; pero hay que ser realistas. El Necaxa nunca recuperó el arrastre que tuvo en el DF alguna vez y por eso se tuvo que ir a Aguascalientes. Ahí, el equipo no se ha podido arraigar del todo con la afición. La franquicia del puerto tiene todo el potencial para ser un mercado rentable para Azcárraga. Por lo que, si decidiera deshacerse de un equipo, el sacrificado, me parece, sería el Necaxa.

Ahora veamos la visión positiva. Desde esta perspectiva, esta es una oportunidad para que el Necaxa recupere el protagonismo que ha tenido históricamente. El respaldo es son dos argumentos de peso:

1. Si bien es cierto que ahora todo indica que el futbol no es prioridad en Televisa. La compra de los Tiburones puede ser visto como un cambio en ese pensamiento. Si se vende al Necaxa, Azcárraga se quedaría sólo con un equipo en primera y otro con potencial para ascender como lo es Veracruz, Salinas Pliego tendría dos y me parece que es cuestión de tiempo para ver al Neza de regreso en primera, finalmente Slim tendría dos equipos en primera y otro con potencial para ascender como lo es la UAG. Conclusión: Televisa no se puede quedar atrás en el fútbol y debe aprovechar a sus equipos.
2. Por otro lado que el Necaxa debe aprovechar el momento, me parece que el equipo tiene una oportunidad única para regresar al Máximo Circuito. Y no porque piense que el Necaxa tiene un trabuco, sino porque se tiene un equipo competitivo y organizado. Así que, en lo que Televisa reacciona y redistribuye recursos (como podría pasar en seis meses), el Rayo podría ganar su boleto de regreso a primera y mostrarse como una opción real de negocio.

Desde mi óptica, esto es lo que debe pasar y lo que me parece pasará. Lo más seguro es que el Necaxa mantenga su base y, en consecuencia, no hay excusas para no obtener el boleto a la final contra la Piedad. Lo que pase de ahí en adelante depende de muchas cosas y es apresurado decir que se logre el ascenso; pero de que tenemos chances de ascender y evitar ser víctimas de este reacomodo de fuerzas “telecomunicacionezcas”, las tenemos. Si el equipo no las aprovecha, mucho me temo que, paulatinamente, nos iremos acercando la visión pesimista.

Pues bueno, esperando que les haya gustado mi columna y que nos leamos pronto, me despido. Si todo sale bien, la siguiente semana espero enviar algo acorde con la temporada de fin de año y también con todo el gusto de que le hayamos ganado a las birrias, aunque sea en pretemporada. Fuerza Rayos!!!, y, si se puede, un follow a @rafaelverasa.